En Guatemala existe una variedad de cantos y villancicos coloniales cantados en las fiestas desde el 16 de diciembre de cada año y estos se prolongan hasta el 2 de febrero del año siguiente, en el día de la presentación del Señor o 2 de Candelaria.
Tradicionalmente el Nacimiento -Belen- se quita solo después del 2 de candelaria, “porque hay que esperar que la Virgen pase a las 12 echando la bendición.
Esta recopilación quiero sumarse para seguir preservando la memoria colectiva e histórica del país, así guardar el acervo cultural y musical del país.
Villancicos y cantos coloniales II
I
Se dirá rezado o cantado, este verso de que usa la Iglesia:
Ven, Santo Espíritu, ven,
hincha, llena de tus dones,
quema, abrasa corazones,
de los fieles que en Ti creen.
Cuando al corazón desciende
Jesús, la verdad se aprecia,
la vanidad se desprecia,
y la caridad se enciende.
Casa virginal tu pecho,
al punto que la deidad
encarnó en tu puridad,
un templo de Dios fue hecho.
Del templo Tú eres el velo,
del testamento la llave
¡oh José, cuánto en ti cabe,
y cuánto se fió a tu celo!
II
CANCION AL NIÑO DIOS
Tendido entre pajas está el Niño Dios,
¡Ay, mi Niño hermoso, prenda de mi amor!
Sus ojos divinos alumbran el sol,
sus manos son perlas que Dios fabricó;
su pecho es un nido de gracia y candor,
y es su fresca boca capullito en flor.
¡Ay, mî Niño, etc.
Con manto de estrellas el Cielo adornó;
El dió al corderito
su blanco vellón,
y al prado y al valle,
de flores vistió; y pobre y desnudo del frío al rigor,
Tendido entre pajas está el Niño Dios.
¡Ay, mi Niño, etc.
Su Madre, que es Virgen
se abisma en su amor,
los Angeles cantan con célica voz,
los pobres le ofrecen su rústico don,
y alzando los brazos
aquel Niño Dios sonríe amoroso
lo mismo que el sol.
¡Ay, mi Niño, etc.
Ven aquí a mis brazos,
Dulce Redentor
Deja que te bese
y haz que muera yo,
cautivo en las redes de tu corazón.
¡Ay, mi Niño, etc.
Dad Niño chiquitito
por tu Madre María,
que todos en este día,
te demos tierno besito.
¡Ay, mî Niño, hermoso,
prenda de mi amor!
III
ALABADO
Gloria in excelsis Deo,
paz en la tierra pues hoy encierra
todo placer.
Hoy ha nacido
Venid pastorcillos
¡oh, qué belleza!
en la pobreza
Dios inmortal.
Ved a la Madre
con qué cariño
al tierno Niño
mirando está.
Venid pastorcillos
al portalejo
ved el reflejo
que hay en Belén.
IV
VILLANCICOS COLONIALES
El Niño nos dice
con modo gracioso
velad esta noche,
niñas de mis ojos.
En aquel portal
un Niño se ve;
su madre, María,
su padre, José.
Venid pastorcitas,
venid a cantar
las glorias del Niño
que está en el portal.
La paz y la gloria,
hermanas, cantemos,
porque paz y gloria
en casa tenemos.
¡Oh, cuánto me alegro,
mi amo Josefito,
que estéis tan gozoso
con tu bello chico.
Vengan las sonajas,
las flautas y pitos
para que entonemos
"arrorró mi Niño.",
Niñito precioso,
pues eres un sol,
haz que resplandezca
en mi alma tu amor.
Aunque pobre tortolita
con las plumitas que visto
al Niño quiero tapar
porque tiene mucho frío.
Aunque pobre tortolita,
mi Jesús recién nacido,
tan pobrecita no estoy
que no tenga un triste nido.
Mi nidito es de pajitas
todo bien entretejido,
y yo allá te llevaré
si te das por bien servido.
No faltará de comer
aunque sean unos granitos:
para eso me diste alas,
para eso me diste pico.
Con amorosos arrullos
te haré dormir, Niño mío,
y a tu madre yo le haré
volando los mandaditos.
Escarcha que te atormenta
quitaré con mi piquito,
que no quiero que se hiele
el que se arde en amor mío.
Si quieres dormir,
mi Niño, yo me estaré en mi ramito
haciendo señas que callen
a todos los pajaritos.
Con esto, Niño de mi alma,
en viéndome en tu servicio,
las aves me llamarán
la tortolita del Niño.
Tomado de:
Novena y ejercicios al Niño Dios en su Sagrado Nacimiento y alabados, canciones y peticiones
Publicado el Guatemala, 6 de Abril de 1906. Autorizada por el RP José M RAMÍREZ COLOM, por la Tipografía Sánchez y Guise